La
idea de impulsar un Proyecto de Ley de Bienestar Estudiantil, surge del seno de
nuestra organización, específicamente de un Comité Directivo Nacional de la UJR; sin embargo, esta
propuesta tiene un ámbito de amplitud, es una ley para todos los estudiantes en
general, especialmente para los pobres, para los excluidos, y para todos
aquellos quienes estén dispuestos a luchar por las reivindicaciones que
proponemos en ella.
Daniel Enríquez, estudiante de Ciencias
Químicas de la Universidad
de los Andes (ULA) y además, Secretario Nacional de la Unión de Jóvenes
Revolucionarios - Juventud Bandera Roja, es uno de los principales actores del
Proyecto de Ley de Bienestar Estudiantil, junto a las estudiantes de Derecho
Linda Hernández y Alma Núñez, quienes han redactado esta propuesta objetiva de
desarrollo, de crecimiento para el país producto del mejoramiento de las
condiciones materiales del estudiantado, y con ello, el mejoramiento de la
calidad de vida y profesional del Venezolano.
Desde la Unión de Jóvenes Revolucionarios proponemos este
proyecto de Ley con miras a levantar el ánimo de los estudiantes en la lucha
por sus justas reivindicaciones, con el objetivo de conformar una plataforma de
lucha estudiantil, de unificar un criterio de lucha política que represente
verdaderamente los intereses de los estudiantes y tome como principal bandera
en su lucha el bienestar estudiantil, la autonomía universitaria, la calidad de
la enseñanza, etc.
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| Daniel Enríquez, Secretario Nacional de la UJR |
Partimos
de una experiencia previa en la elaboración de instrumentos legales, en 1.994
un compañero de la juventud propuso un Proyecto de Ley de Pasaje Estudiantil,
el cual está engavetado desde entonces, pero todavía hoy cobra plena vigencia.
En un principio, este Proyecto de Ley de
Bienestar Estudiantil, contenía únicamente el aumento de becas, pero luego
comprendimos que debíamos ampliar el panorama al bienestar estudiantil de modo
que se garantice al estudiante todas las condiciones para que pueda desarrollar
y culminar sus estudios de manera satisfactoria.
Algo
tenemos claro, y es que el movimiento estudiantil necesita activarse, y este
Proyecto de Ley nos impone la obligación de luchar; la Ley de Bienestar Estudiantil
es pues, un llamado a los estudiantes y a la juventud Venezolana a la lucha. El
gobierno nacional pretende mediante la asfixia presupuestaria a las
universidades, el cierre técnico de estas y así justificar su intervención.
Hace 11 años intervino todas las universidades experimentales y los colegios
universitarios y el movimiento estudiantil permaneció silente ante ello, lo
cual es imperdonable.
Buscamos
pues, con este Proyecto de Ley, el fortalecimiento del movimiento estudiantil y
sacarlo del desgaste en el cual se encuentra sumergido, fortalecerlo incluso
antes de que sea aprobado en la Asamblea
Nacional dicho Proyecto Ley. Debemos contar con el apoyo de
los estudiantes en general, a ellos va dirigida esta propuesta y necesitamos de
su respaldo, no solamente con sus firmas, sino en las calles defendiendo lo que
nos corresponde.
La
inversión necesaria para cumplir con esta ley es mucha, pero sin embargo,
existe la factibilidad económica para ello y así lo plasmamos en el Proyecto
Ley. En esta economía rentista, el ingreso petrolero es suficiente, y debe ser
invertido tanto en el bienestar estudiantil, en las universidades en general y
por supuesto, en la diversificación de nuestra economía. Aumentar el
presupuesto para las universidades aumenta los beneficios; por lo tanto
exigimos más presupuesto y claro está, ejerceremos sin dobleces la contraloría
para que ese dinero no sea desviado.
Se
espera que en aproximadamente mes y medio estemos entregando la ley, luego de
pasar los parámetros de revisión técnica-jurídica, así como la primera
presentación formal del proyecto que se llevará a cabo en Mérida, y
posteriormente, con la colaboración de la FCU
UCV, se dará a conocer en el parlamento universitario. Por
último, convocaremos a una gran movilización nacional para entregar el Proyecto
de Ley de Bienestar Estudiantil a la Asamblea Nacional.
Luchar por
la Ley de
Bienestar Estudiantil es luchar por la justicia social. Dicha ley va en función
de los más pobres, de los excluidos, de los que tenemos menos posibilidades de
estudiar en una universidad. No es ajena nuestra lucha por el bienestar
estudiantil, por el respeto a la autonomía universitaria y por la calidad de la
enseñanza, a las luchas que emprenden los estudiantes en todo el continente Americano
y el mundo entero, por conquistar el derecho a la gratuidad de la educación
(derecho el cual en Venezuela fue conquistado anteriormente); forman estas
diversas luchas una sola expresión, una sola voz por lograr la verdadera
inclusión social en nuestras universidades, para lograr que la educación sea un
derecho para todos y no un privilegio de pocos.
Vea la entrevista completa realizada a Daniel Enríquez en:
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